2 de febrero de 2015

Fuente: AICA

 

Buenos Aires (AICA): La Corporación de Abogados Católicos manifestó su “estupor” y también “una enorme preocupación” ante la “muerte violenta” del fiscal Alberto Nisman y llamó a “redoblar la práctica de las virtudes de la paciencia y la esperanza”, a la espera de que se esclarezcan las circunstancias de su deceso. Los integrantes de la entidad consideraron que no es posible aislar el hecho de las tareas a su cargo, que lo llevaran a formular una grave denuncia contra las autoridades más altas del Poder Ejecutivo.

La Corporación de Abogados Católicos manifestó su “estupor” y también “una enorme preocupación” ante la “muerte violenta” del fiscal Alberto Nisman y llamó a “redoblar la práctica de las virtudes de la paciencia y la esperanza”, a la espera de que se esclarezcan las circunstancias de su deceso. Los integrantes de la entidad consideraron que no es posible aislar el hecho de las tareas a su cargo, que lo llevaran a formular una grave denuncia contra las autoridades más altas del Poder Ejecutivo.

Los profesionales pidieron que la tarea del fiscal Nisman y la investigación que se sigue sobre su muerte sean continuadas y conducidas con la responsabilidad y seriedad que la circunstancias exigen, dejando de lado toda posición política. También reclamaron que el Poder Judicial “realice la tarea que le es más propia, impartiendo justicia, condenando culpables y absolviendo inocentes”.

El comunicado de los abogados católicos, de fecha 2 de febrero, lleva la firma de su presidente el Dr. Enrique Ramos Mejía y de su secretario el Dr. Agustín María Casares.

La Corporación de Abogados Católicos, como la mayor parte de los argentinos, observa con estupor y también con una enorme preocupación, la muerte violenta de un fiscal de la Nación, no siendo posible aislar el hecho de las circunstancias por las que atravesaba el funcionario público con relación a las tareas a su cargo y que lo llevaran a formular una grave denuncia contra las autoridades más altas del Poder Ejecutivo.

En momentos aciagos como el que vivimos al comienzo de esta semana con la muerte del Fiscal Dr. Alberto Nisman, se impone exhortar a todos a redoblar la práctica de las virtudes de la paciencia y la esperanza, basadas en que la justicia ha de triunfar al final del camino y aquellos que han obrado contra la ley tendrán su castigo tarde o temprano, seguidas de un espíritu y un obrar hacia la paz social, con el firme propósito de cumplir y hacer cumplir la ley por parte de todos y cada uno de los ciudadanos de la República Argentina, tomando la iniciativa aquellos que tienen más responsabilidad. Sólo el imperio del derecho que implica el acatamiento de la Constitución Nacional íntegramente, abrirá el horizonte de un futuro promisorio.

Por lo que, en momentos en donde parecen avasallarse los valores democráticos y republicanos de nuestra Nación, instamos a que tanto la tarea iniciada por el Dr. Nisman como las circunstancias de su muerte, sean continuadas y conducidas con la responsabilidad y seriedad que la circunstancias exigen, dejando de lado toda posición política y que el Poder Judicial, realice la tarea que le es más propia, impartiendo justicia, condenando culpables y absolviendo inocentes.