Por Jorge Rouillon para AICA
Martes 17 Mar 2015
Buenos Aires (AICA): La visión antropológica que ofrece el cristianismo en lo personal, lo familiar y lo comunitario junto con la defensa de la libertad es fundamental para inspirar reglas de juego que mejoren la calidad de vida de los ciudadanos. Así se expresó Mario Šilar, joven profesor de filosofía argentino radicado en España, al hablar sobre “Empresarialidad, instituciones y cristianismo” en un encuentro organizado por el Instituto Acton Argentina en la sede porteña de la Universidad Austral. El disertante valoró el papel de la cultura emprendedora en la vida económica –y en la cultura general- de un país.
La visión antropológica que ofrece el cristianismo en lo personal, lo familiar y lo comunitario junto con la firme defensa de la libertad es fundamental para inspirar reglas de juego que mejoren la calidad de vida de los ciudadanos.
Así se expresó Mario Šilar, joven profesor de filosofía argentino radicado en España, al hablar sobre “Empresarialidad, instituciones y cristianismo” en un encuentro organizado por el Instituto Acton Argentina en la sede porteña de la Universidad Austral, Cerrito 1250.
Šilar es investigador del Instituto Acton Argentina y director del European Business Ethics Network (EBEN, Red Europea de Etica de los Negocios). Licenciado en Filosofía por la Universidad del Norte Santo Tomás de Aquino (Unsta), cursó un posgrado en Organización Educativa en la Universidad Austral y una maestría en Derecho de la Integración Económica en la Sorbona, París.
El disertante valoró el papel de la cultura emprendedora en la vida económica –y en la cultura general- de un país. Expresó que los individuos se comportan de un modo emprendedor en la medida en que intentan mejorar una situación vital concreta. Y esa actitud emprendedora está vinculada con la innovación.
Pero esa posibilidad de emprender e innovar puede verse facilitada o dificultada por las reglas de juego imperantes. “Las instituciones jalonan nuestra existencia”, dijo el orador. Explicó, por ejemplo, que en un partido de fútbol hay algo que se ve –los jugadores, el público en las tribunas, los goles- y hay algo subyacente, que no se ve –el reglamento que da sentido al juego-.
Las reglas de juego de una sociedad pueden ser formales –lo que dicen la Constitución y las leyes- o informales –las costumbres, lo que verdaderamente se da o se admite, cómo se aplican las leyes-. Así citó a un economista israelí, Yoram Barxell, quien decía que los soviéticos habían logrado convencer a Occidente de que en la URSS nadie era dueño de nada, con el mito de la abolición de la propiedad privada o la existencia de la propiedad colectiva. Pero en realidad ocurría que los que ostentaban el poder eran los dueños de todo. En teoría, la Unión Soviética estaba organizada según la propiedad colectiva, pero en la práctica había una sociedad fuertemente burocratizada y rentística. Y los burócratas tenían amplísimos derechos de propiedad en el control de los recursos.
El orador hizo hincapié en la importancia de las bases culturales y morales de una comunidad, que contribuyen a dar sentido, o a quitárselo, a las reglas de juego.
Šilar dijo que usando su libertad las personas pueden fracasar y aprender de sus fracasos. Observó un aprendizaje social en España, donde los empresarios –un entramado sólido, con un 80% de pequeñas y medianas empresas- deben esforzarse porque saben que pueden ir a la quiebra. Y expresó: “Queremos una sociedad de ciudadanos libres y responsables con una economía de mercado con ganancias y pérdidas. Si tenemos una sociedad donde los individuos son libres pero no tienen ninguna responsabilidad y una economía de mercado donde permites las ganancias pero socializas las pérdidas ¿por qué vas a esperar que el sistema no colapse?”.
El profesor Gabriel Zanotti, director y cofundador del Instituto Acton Argentina, presentó al orador, a quien mencionó como graduado en Estudios Avanzados en la Universidad de Navarra, miembro del consejo consultivo del Instituto Acton Argentina, estudioso de materias tales como la doctrina social de la Iglesia, la libertad religiosa y la economía de mercado. Al concluir la exposición, hubo un animado intercambio de ideas entre los asistentes.
El Instituto Acton define como su misión “promover una sociedad libre y virtuosa, caracterizada por la vigencia de los derechos personales y la economía de mercado, en armonía con la fe católica”. El miércoles 18, de 13 a 18.30, el Instituto realizará un congreso sobre Libertad religiosa, económica y política y los fundamentos cristianos de la sociedad libre en el auditorio Juan Pablo II de la Universidad Católica Argentina (UCA), Alicia M. de Justo 1680 (se inscribe en: info@institutoacton.com.ar).+ (Jorge Rouillon)
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